top of page

Agresividad: ¿adquirida y determinante o innata y modificable?

En Bogotá, los perros son las mascotas preferidas. Desde los más comunes –  sin raza ni pedigrí –  llamados “chandosos” o “criollos”; hasta los más refinados que nombramos como “de raza”. Sin embargo, no todos los perros de raza son reconocidos con adjetivos referentes a la admiración y respeto. Muchos son denominados como “agresivos” o “salvajes”. Pero, ¿qué tan acertada es esta denominación?

El famoso refrán “El perro es el mejor amigo del hombre” demuestra la relación de profunda cercanía entre los perros y el ser humano. El periódico El Espectador afirma que “En Colombia, seis de cada diez familias cuentan con alguna mascota en su casa, siendo los perros los animales preferidos”, lo cual explica la primacía de los perros frente a otras mascotas. El alimento, la atención, el cuidado y el amor son las máximas básicas para cuidar a una mascota. El periódico El Heraldo explica los cuidados adicionales y los costos que implica un perro. La labor no es sencilla.

 

Tener un perro implica compromisos, responsabilidades y una disposición fija de recursos para garantizar una calidad de vida óptima para la mascota. Por ejemplo, para los perros es esencial el hábito del paseo y salir al aire libre: éste es el espacio en el que los perros hacen sus necesidades fisiológicas, se relacionan con otros de su misma especie y con personas diferentes a sus dueños. Estos espacios, además de resultar siendo propicios para la actividad física y moral de la mascota, implican responsabilidades cívicas y sociales con el entorno en el que se encuentran enmarcados: recoger los excrementos, cuidar las zonas verdes y parques, y poner bozal a los perros. Los dos primeros ítems son comunes a todas las razas, pero el último ¿aplica para todos?, ¿cuáles perros lo deben tener?, ¿cuáles no?

 

En el Art. 108-C de la ley 746 del 2002, se establece que “en las vías públicas, en los lugares abiertos al público, y en el transporte público en que sea permitida su estancia, todos los ejemplares caninos deberán ser sujetos por su correspondiente traílla. En el caso de los ejemplares objeto de los artículos 108-E y 108-F de la presente ley, deberán portar además su correspondiente bozal y permiso”. ¿Cuáles son los perros de los artículos 108-E y 108-F? ¿Por qué deben tener estos permisos extras?

 

Las razas Terrier: Principales focos de prejuicios y rechazo. 

 

“Esos perros [raza Pit Bull] son muy agresivos, ponen en peligro a los niños. Son tan grandes que pueden morder a alguien en cualquier momento y sería muy difícil impedirlo. ¿Usted no sabe? Esos perros fueron creados para la guerra: hicieron cruces para que pudieran ser más salvajes” Afirmó Gloria Sánchez, residente del barrio La Soledad, refiriéndose a un perro pitbull del parque. El rol de la apariencia física de los perros en un sistema de social y cultural no es muy distinto al de los seres humanos. A primera vista,  la apariencia brinda las características más evidentes del ser que se esté observando. En el caso de los perros de razas vigorosas, fuertes y de aspecto dominante se generan prejuicios, en su mayoría, negativos. Estos prejuicios se transforman en una fórmula generalizada y «mitificada» que fija los adjetivos que denominan a estas razas como “agresivas” o salvajes”. En especial, el rechazo se manifiesta ante los perros cuya raza fue modificada genéticamente en sus orígenes, como el Pit Bull y el Bull Terrier, principalmente.

 

Esta es la historia de aquellas razas de perros que han sido condenadas a un bozal debido a su genética y marcado pasado.  ¿Por qué se da por sentada la creencia de que todos son agresivos?

 

Los Pit Bull Terrier Americanos y Los Bull Terrier

 

Según el American Bully Kennel Club (ABKC), los perros de la raza Pitbull Terrier americana se caracterizan por ser ágiles, activos y poderosos. Esta raza fue originada con el fin de potenciar las características del Staffordshire Bull Terrier, conservando las cualidades de fuerza, tenacidad y coraje. Por otra parte, el Bull Terrier es fuerte, disciplinado y territorial; lo cual lo hace ser un buen perro guardián. Ambas razas fueron utilizadas en peleas con toros, animales domésticos y entre sí; de ahí que se halla grabado el imaginario de que son razas forjadas para la pelea.

 

Sin embargo, aunque el ABKC se especialice en determinar los aspectos fisiológicos y biológicos de los perros para certificar que cumplen los estándares de la raza a la que pertenecen, ellos reconocen que los perros tienen cualidades más allá de lo físico y los clasifican como amables con sus seres queridos y compañeros leales de la familia “El Bull Terrier es valiente, inteligente, sociable, curioso (…) Su necesidad de atención hace que el Bull Terrier sea adecuado para una familia activa donde recibe una gran cantidad de interacción y estímulo”. Además, el ABKC resalta que estos perros tienen un amor especial por los niños “El Pit Bull Terrier Americano (PBTA) [es] un compañero excelente de la familia con un amor especial por los niños. La raza exhibe cierto nivel de agresión del perro; por lo tanto, es imperativo que los propietarios lo entrenen al perro valores de obediencia y educación”

 

¿De quién es la culpa: del dueño o del perro?

 

Al respecto, Lucía Fernández, docente del curso Etología y Bienestar Animal de la Universidad de Ciencias Aplicadas y Ambientales (UDCA), afirma que “los músculos, principalmente el masetero y el temporal, de la mandíbula de los Pit Bulls poseen una fuerza exagerada. En muchos casos la mandíbula sujeta la piel del animal al que se ataca y la fuerza de la mordida puede causarle daños graves (…) pero, poniendo en consideración la gravedad de su mordida, no hay evidencia alguna para declarar que el perro sea agresivo o peligroso. Lo que lo hace agresivo o peligroso depende de lo que le haya tocado vivir: depende de la educación”. Definitivamente, la educación es el aspecto que marca la diferencia. Si existe una educación para la pelea o para el ataque, el perro solamente responderá a sus instintos. Pero con una educación en torno al adiestramiento y control justo sobre el perro, cualquier comportamiento agresivo contra los seres humanos y demás animales seguramente será evitado.

 

El perro es como un niño: juega, hace daños, aprende, come y duerme. Es una criatura a la que hay que enseñar, explicar y – en un sentido más literal – adiestrar, con el fin de que se comporten bien. “La actitud y la manera de ser de un perro se da de la misma manera que con una persona: por su entorno. Entonces si es agresivo o no, dependerá realmente de su crianza, de la manera en que su familia lo educó – y lo sigue educando – y de los espacios en los que se enseña a estar.” Comenta Adrián Mullen, miembro del círculo de participación Conciencia Animal Uniandina. 

SOBRE EL AUTOR

Daniela Margarita Maestre M. Estudiante de Lenguajes y Estudios Socioculturales de la Universidad de los Andes. http://dialectiquedesfleurs.tumblr.com/

El periódico Tribuna Valladolid expuso la manifestación ocurrida en julio del 2015, en la ciudad española de Valladolid, a favor de los Perros Potencialmente Peligrosos.

Los PPP: “Perros Potencialmente Peligrosos”

 

A las razas cuyos comportamientos y características físicas se consideran como agresivos debido a su genética, es decir que se considera que la naturaleza de su especie es inherentemente agresiva, les fue otorgada esta denominación legislativa. Ésta es aplicada para los perros que son considerados como posibles amenazas para los seres humanos en España, Venezuela y Colombia. Lucía Fernández plantea que “el tema es complejo por las implicaciones relacionadas con salud pública y también es complejo debido a la relación que existe entre la personalidad de  los propietarios de los perros mal llamados peligrosos”. En Colombia son trece razas denominadas por el adjetivo negativo de “potencialmente peligrosos”. Si bien existe un riesgo por sus características fisiológicas, esta denominación no debería ser aplicada, ya que construye un estereotipo de animal salvaje. Estereotipo que, en muchos casos, puede resultar siendo justificación para el maltrato.

 

Ley 746 del 2002

 

La ley 746 del 2002 regula la tenencia y el registro de perros potencialmente peligrosos. En el Art.108-F se enuncian los ejemplares caninos potencialmente peligrosos “Se considerarán perros potencialmente peligrosos aquellos que presenten una o más de las siguientes características: a) Perros que han tenido episodios de agresiones a personas u otros perros; b) Perros que han sido adiestrados para el ataque y la defensa; c) Perros que pertenecen a una de las siguientes razas o a sus cruces o híbridos: American Staffordshire Terrier, Bullmastiff, Dóberman, Dogo Argentino, Dogo de Burdeos, Fila Brasileiro, Mastín Napolitano, Pit Bull Terrier, American Pit Bull Terrier, De presa canario, Rottweiler, Staffordshire Terrier, Tosa Japonés.” Por lo tanto, existe una diferenciación claramente definida de estos perros respecto a los de otras razas.

 

"Not a Bully" (No es peligroso)

 

Sophie Gamand, fotógrafa francesa escritora del libro Flower Power, Pit Bulls of the Revolution, retrata a perros de raza peligrosa en un escenario diferente. El periódico mundoanimalia explica “El objetivo de Sophie era romper esquemas y acabar con los prejuicios que les convierten en víctimas incomprendidas” debido a que, al ser estas razas perros muy fuertes y enérgicos, no se destaca en la cotidianidad su bondad y dulzura. Como todos los demás perros, estas razas necesitan disciplina para no desarrollar un comportamiento dominante. Gamand reconoce la nobleza y lealtad de la estas razas, mal llamadas peligrosas, y su fraterna relación con la familia y los niños.

Evalúe sus prejuicios

 

Por: Daniela Maestre

 

© 2023 by Name of Site. Proudly created with Wix.com

  • Facebook App Icon
  • Twitter App Icon
  • Google+ App Icon
bottom of page